18 de diciembre de 2010

Cuando hacemos un estiramiento, no solo estiramos el músculo, sino también estiramos el nervio que viaja con él

Vamos a poner como ejemplo el estiramiento del isquiotibial para entenderlo mejor.
Imaginemos que tenemos un paquete de espaguetis (es nuestro muslo izquierdo). Imaginemos que un espagueti es el nervio (nervio ciático). Éste lo hemos puesto a cocer durante 5 minutos, y cuando le hacemos la prueba de estiramiento, lo máximo que alcanza a estirarse son 15 cm, sin romperse. Imaginemos que otro espagueti es el músculo (músculo isquiotibial). Éste lo hemos puesto a cocer durante 15 minutos y cuando le hacemos la prueba de estiramiento, lo máximo que alcanza a estirarse son 20 cm, sin romperse.

El espagueti músculo (E.M) siempre es más extensible (20cm) que el espagueti nervio (E.N) (15cm).
Iniciamos el estiramiento del isquiotibial, colocando el pie en alto, encima de una silla, y avanzamos inclinando el tronco hacia delante.
El E.M es el que mueve la articulación, porque tiene capacidad de contracción, mientras que el E.N se adapta de manera pasiva al cambio de longitud. Como el E.N es una estructura que se estira de forma pasiva pero es de vital importancia para que se produzca el movimiento, necesita de un sistema de defensa que le proteja frente al sobreestiramiento y a la rotura. Este sistema de defensa es el E.M.

Vamos a explicar cómo lo hace el E.M.
El E.N es el jefe del E.M y el E.M el empleado que siempre obedece.
Cuando vamos a estirar un músculo, se estira tanto el E.N como el E.M. Mientras que el E.N se va estirando a 11cm, 12 cm, 13 cm, no dice nada porque todavía le queda margen de extensibilidad, y el E.M como es más extensible, se encuentra cómodo. Pero cuando el E.N llega a 14cm, se empieza a sobresaltar creyendo que si se sigue estirando se va a romper, y ordena al E.M a contraerse y acortarse. Y así nos hemos acortado ambos a 12cm. Ahora el E.N puede estar tranquilo.

Esto ocurre, cuando, estando en el proceso de estiramiento de un músculo, llego a sentir sensación de tirantez fuerte o dolor. El dolor aparece porque al nervio no le gusta que le sobreestiren, ni al músculo tampoco, y cuando se les irrita, se quejan en forma de dolor. Lo que provocamos con esta forma de estirar es que el músculo se acorte, nos sintamos más rígidos y compactos. Estamos practicando los "rumores del estiramiento".

Esta historia tiene como objetivo reforzar el concepto de que cuando estiramos un músculo siempre tenemos que llegar a quedarnos en la sensación de tirantez leve (12cm, nuestra barrera de seguridad) y así no despertar el reflejo de contracción del músculo.

Si practico los estiramientos a lo largo del tiempo, meses, años, voy consiguiendo que el nervio alcance más extensibilidad, 16cm, 17cm, 20cm, y el músculo también. Es un entrenamiento, donde los beneficios se consiguen con el tiempo.

Además de la técnica de los estiramientos, hay otras técnicas que mejoran la extensibilidad de los músculos y nervios. Una de ellas se llama neurodinamia. Consiste en provocar un deslizamiento del nervio (deslizar nuestro espagueti), moviendo las articulaciones (en una dirección, velocidad, repetición y tensión concreta) para conseguir que el nervio sea más extensible. Todo esto sin necesidad de hacer estiramientos. Después se observa que el músculo es más extensible. Esta técnica se aplica por un fisioterapeuta.